Artículos de interes

Artículos de interes - 22 Sep 2010

Pornopolítica. Por Sofía Montenegro

Ramas en la Asamblea

Si la pornografía es el “tratado acerca de la prostitución”, la serie de prácticas que realiza el gobierno para imponer su voluntad y permanecer en el poder contra viento y marea, podrían definirse como pornopolítica.

Quien promueve tales prácticas sería por tanto un proxeneta, o sea, un rufián que obtiene beneficios obligando –por amenaza, extorsión o soborno- a las personas a vender su cuerpo. La publicación en La Gaceta, diario oficial, de un texto de la Constitución de la República que no corresponde al verdadero, ordenado por el presidente y la segunda secretaria de la Asamblea Nacional, simboliza aquella rama colgada a la puerta que en la Edad Media significaba “cuerpo a la venta” y que representa el más grande y último acto de la pornografía del poder. Se juntan aquí comercio, obscenidad y trampa, donde tales diputados se convierten en “rameros” de la pornopolítica puesto que como se dice en la novela El Padrino “en este documento o está su firma o están sus sesos”. Cierto que no son los únicos, puesto que hay diputados “opositores” que sólo les dicen “siéntense” y ellos se acuestan, pero dada la investidura del asunto esto es alta prostitución. ¿Será que creen que estas obscenidades les dan legitimidad?